Un 17 de junio de 2008, Miley Cyrus dejaba atrás la imagen de Hannah Montana y daba un gran paso hacia su identidad como artista solista con el lanzamiento de “7 Things”, el primer sencillo de su álbum Breakout. La canción, con tintes de pop rock adolescente y una carga emocional intensa, se convirtió rápidamente en un himno para los corazones rotos de toda una generación.
Con su letra directa, vulnerable y explosiva, “7 Things” capturaba esa mezcla de rabia, amor y confusión que muchos sentimos tras una ruptura. Los rumores sobre que estaba inspirada en su relación con Nick Jonas solo alimentaron el interés del público y los medios.
📝 En el videoclip, dirigido por Brett Ratner, Miley aparece junto a un grupo de chicas que también expresan su dolor y frustración frente a la cámara, en una especie de terapia colectiva que, 17 años después, sigue siendo igual de poderosa.
Algunas razones por las que “7 Things” sigue siendo icónica:
Representó el primer gran quiebre de Miley con su imagen infantil.
Alcanzó el Top 10 en el Billboard Hot 100.
Mostró un lado más crudo y real de las emociones adolescentes.
Fue la antesala de una carrera llena de reinvenciones.
A día de hoy, “7 Things” sigue siendo recordada con cariño como uno de los momentos más sinceros y explosivos de la era Disney Channel, y como una prueba de que Miley Cyrus ya tenía muy claro que su voz iba mucho más allá de los estudios de grabación de Disney.
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